Tuesday, August 08, 2006

XI General Paul

¡Vaya mequetrefe! Se hace llamar "general", cuando pasó la mayor parte de la Gran Guerra escondido tras las faldas de la madre y los millones de su padre. Hoy convoca a otros tantos ilusos a diezmar poblaciones por causa de su credo o religión. Hoy, así, embauca a cientos de arribistas, hambrientos de poder, sedientos de sangre, a matar a los ministros de culto que han sobrevivido a esta guerra funesta. ¿La razón? Haber provocado la Gran Guerra y no haber podido contenerla. Parece que al general Paul le conviene no saber más que lo que los ricos y poderosos quisieron que supiera la demás gente. Pero, dentro de sí, conoce lo que los millonarios, como su padre, planearon para el destino de la humanidad. Por eso llama al exterminio y azuza a idiotas de su calaña a asesinar a todo aquel que abogue por un dogma diferente.

Si no fuera por esta emergencia que ha surgido, les juro que no estaría aquí, al lado del compañero enfermo: Iría en pos de la alimaña, a buscarla en su madriguera, a aplastarla hasta dejar que sus restos den testimonio de lo que le pasa a los inicuos. Pero no se preocupen, estaré aquí con ustedes, solidario, mientras no sepamos si es "redención" o no, lo que aqueja a nuestro camarada.

Joaquín.